El porcentaje de la renta obtenida que se paga en el Estado depende, en primer lugar, de la clase de renta. La procedente del ahorro tributa en un porcentaje menor que la renta que no forma parte del ahorro, conocida como general. Esta renta general tributa de acuerdo a una escala progresiva : el porcentaje de la renta que se paga por el IRPF se incrementa a medida que aumenta la renta. De esta manera se favorece a las personas con menores ingresos.
Los tramos para la declaración de la renta del IRPF son los siguientes:
- Desde 0 hasta 12.450 euros: retención del 19%.
- Desde 12.450 hasta 20.199 euros: retención del 24%.
- Desde 20.200 hasta 35.199 euros: retención del 30%.
- Desde 35.200 hasta 59.999 euros: retención del 37%.
- Desde 60.000 hasta 29.999 euros: retención del 45%.
- Más de 300.000 euros: retención del 47%.
- Esta tabla es una estimación sumando el gravamen estatal y autonómico, tomando como referencia para este segundo los tipos aplicables a los contribuyentes no residentes en España.
Además, el contribuyente no tributa por la totalidad de sus ingresos al tipo de retención mas alto, sino que los porcentajes se van aplicando uno a uno, empezando por el inferior. Por ejemplo, si una persona ingresa 22.000 euros brutos al año, no paga por el IRPF el 30% de ese total, sino un 19% por los primeros 12.450 euros, un 24% de los siguientes 7.750 euros ( segundo tramo ) y un 30% por los restantes 1.800 euros ( tercer tramo ).
Los tramos del IPRF de 2024, que afectarán a las declaraciones que se presenten en la campaña de la Renta de 2025, no han variado por el momento.